El Gobierno de Guillermo Lasso, presidente de la República de Ecuador presentó resultados de la desnutrición crónica infantil 2022-2023, el acto se cumplió en el centro Quorum en Cumbayá en donde estuvo presente la Viceprefecta de Tungurahua Vanessa Lozada.
El presidente Lasso recordó que en 2018 la prevalencia de desnutrición crónica infantil para niños menores de 2 años era del 23,6 %, actualmente es de 20,1 %, luego de dos años y medio de su administración.
Indicó que en la actualización de la encuesta de salud y nutrición del 2018 según los estándares de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef, la prevalencia fue del 23,6 % y no 27,2 %, como cuando inició el Gobierno.
La investigación a cargo del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) contó con apoyo de Unicef, y refirió que disminuir la desnutrición crónica infantil requiere soluciones en temas de saneamiento, medioambiente, agua y, sobre todo a los controles de salud en los primeros 1.000 días de vida.
Edwin Ronquillo, secretario técnico de Ecuador Crece sin Desnutrición Infantil, dijo que el Ministerio de Salud Pública mejoró el control de niños, el bono de 1.000 días ahora lo tienen 62.000 madres embarazadas y menores de 2 años, además indicó que se ha financiado a varios municipios con 269 millones de dólares invertidos en agua potable, saneamiento y riego.
El Estado busca reducir en 6 % la desnutrición crónica infantil hasta 2025, para esto se han invertido cerca de 544 millones de dólares y al finalizar este año serían 648 millones.
Para Vanessa Lozada, Viceprefecta de Tungurahua esta mejora en los resultados de la desnutrición crónica infantil se deben al trabajo realizado por la Secretaria Ecuador Crece sin Desnutrición, pero esta articulado con el Ministerio de Salud Pública (MSP) y el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES).
Señaló qué uno de los puntos relevantes en el que ha invertido el Gobierno es el agua potable, y esto significa aportar en salud y por ende en la infancia.
Otro punto importante que se tomó en cuenta son los 1000 primeros días del infante, desde el momento que la madre queda embarazada ya se interviene en el control y cuidado de ella y el infante, y posteriormente se centra el proceso en la lactancia materna y las dosis de vacunación, todo ello ha permitido obtener mejores resultados.